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Creatividad

 

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS.

 

La creatividad es un concepto abstracto pero a la vez conocido por todo el mundo; pero… ¿realmente sabemos qué es la creatividad?, ¿es la creatividad un valor en auge?, ¿se puede aprender a ser creativo?, ¿debemos fomentar la creatividad en la educación?

En primer lugar me gustaría exponer el motivo de haber escogido este tema. La creatividad es un concepto que me ha llamado desde siempre la atención y que me sugiere muchas preguntas entre las que destaco las que he formulado anteriormente. En esta exposición me gustaría tratar de darlas respuesta y tratar de incrementar un poco más mis conocimientos en este tema.

 

CONCEPTO E HISTORIA DE LA CREATIVIDAD.

 

La creatividad esuna habilidad que poseemos los seres humanos desde el origen de los tiempos. De hecho, somos seres creativos desde que nacemos. Pero hasta hace más bien poco, dicha habilidad no era tenida muy en cuenta, y por consiguiente, no se ha valorado, fomentado, ni estudiado en profundidad.

A lo largo de la historia nos encontramos cómo la creatividad ha acompañado al ser humano dando lugar a un sinfín de descubrimientos, inventos, y ha ayudado en la resolución de numerosos problemas.Desde hace siglos, se le han atribuido diferentes concepciones, dependiendo de la etapa histórica.

 

  • Antigüedad:En la antigüedad,“no se crea” sino se limita a plasmar la realidad, valorando sobre todo la destreza.

  • Entre los siglos V al XVIII (englobaríamos la Edad Media y la Edad Moderna), el concepto de creatividadera una cualidad no atribuible al ser humano. Podemos observar este cambio importante a través de la expresión “creatio ex nihilo” (creado a través de la nada), donde se atribuía la facultad de crear (creatividad) exclusivamente a Dios.

  • En el Renacimiento se rompe el lazo entre creatividad-Dios y por primera vez se le reconoce al individuo su capacidad creadora y creativa, que empieza a ser aceptada en la sociedad.

  • Como podemos observar, el concepto de creatividad ha ido poco a poco superando esa connotación negativa que iba arrastrando a lo largo de la historia.

  • En el siglo XX (concretamente a mediados) por fin nos encontramos con estudiosos que profundizan y analizan el significado de “creatividad” y lo que ello implica. Uno de los pioneros en este campo fue el psicólogo Joy Paul Guilford, el que propuso el término de creatividad, diferenciando entre creatividad e inteligencia. Según este autor son conceptos diferentes, pese a ser habilidades homólogas. Para Guilford, la creatividad es una forma distinta de inteligencia, a la que llama “pensamiento divergente”. Ésta se caracteriza por las múltiples respuestas y alternativas para resolver un problema; se despliega en múltiples direcciones en busca de distintas perspectivas y utilizando diferentes enfoques.

 

Desde entonces, este concepto no ha hecho más que crecer y actualmente está siendo  estudiado por multitud de sociólogos y psicólogos.

Algunas de las definiciones de creatividad enunciadas por algunos de los mejores estudiosos del tema podrían ser: “La creatividad se origina en un conflicto inconsciente. La energía creativa es vista con una derivación de la sexualidad infantil sublimada, y que la expresión creativa resulta de la reducción de la tensión” (Freud, 1963). “La creatividad constituye la forma final del juego simbólico de los niños, cuando éste es asimilado en su pensamiento” (Piaget, 1964).  “La creatividad no es una especie de fluido que pueda manar en cualquier dirección. La vida de la mente se divide en diferentes regiones, que yo denomino inteligencias, como la matemática, el lenguaje o la música. Y una determinada persona puede ser muy original e inventiva, incluso inconoclásicamente imaginativa, en una de esas áreas sin ser particularmente creativa en ninguna de las demás”. (Gardner, 1999).

Complementando las definiciones anteriores de todos estos renombrados autores, podemos mencionar el punto de vista de Csikszentmihalhy (1996), que añade un nuevo factor ya que para dicho autor la creatividad se produce cuando interaccionan los pensamientos de una persona con un contexto sociocultural.

La definición propuesta por Csikzenmihalyi nos introduce una nueva variable que afecta y se relaciona directamente con la creatividad, y que puede fomentarla o bloquear el proceso creativo: el aspecto sociocultural.

Tras analizar estos puntos de vista y los conceptos aportados por dichos autores, se podría resumir el concepto de creatividad en la habilidad para crear o imaginar cosas relativamente nuevas que, aunque se da fundamentalmente en los niños, todas las personas tenemos (por lo menos en algún ámbito de la vida) y que está influida y condicionada por la sociedad y el contexto sociocultural en el que nos movemos.

 

IMPORTANCIA DE LA CREATIVIDAD.

 

¿Qué importancia tiene la creatividad en nuestros días? En mi opinión, cada vez mayor.

Hasta hace poco, como ya he señalado previamente y ha quedado demostrado al analizar la historia de dicho término, no era un concepto tenido en cuenta. Estaba “ahí”, pero nadie se percataba de su importancia, ni eran conscientes de cuándo la utilizaban. Desde hace relativamente pocos años, estamos comenzando a ver cómo la creatividad está ganando importancia:

  • Conceptos como“pensamiento lateral” ó “curriculum creativo” están siendo cada vez más utilizados en nuestro día a día.

  • Cada vez hay más libros que hablan sobre cómo convertirse en una persona creativa (Piensa como un genio, de Juan Prego; El pensamiento creativo, de Edward de Bono).

  • En las empresas cada vez se utilizan más diferentes técnicas creativas (para resolver problemas o tomar decisiones – a través del método de “Seis Sombreros para Pensar”,fomentar el trabajo en equipo y la innovación – utilizando la dinámica propuesta en “Lego Serious Play”, etc).

  • Las personas, ante la cantidad de competencia existente en el mercado laboral, comienzan a buscar empleo mediante “técnicas creativas” – video currículums y otras formas de presentar su formación y experiencia, diferentes del tradicional currículum en papel.

 

Las empresas demandan, cada vez más, personas creativas que les puedan aportar cierta ventaja competitiva frente a sus competidores (la tecnología está al alcance de cualquiera y los productos se pueden copiar cada vez más fácilmente. Por esto, las empresas se ven obligadas a buscar la única cosa inimitable, única, y que es el talento de las personas; su capacidad para seguir generando nuevas ideas, nuevas formas de hacer las cosas, que realmente logrará diferenciarlas).

La sociedad demanda cada vez más productos y servicios diferentes, que satisfagan nuevas y cambiantes necesidades.  Y es en este punto, al hablar de servicios creativos, dónde situamos a la educación. ¿Ha llegado la creatividad a los colegios?, ¿Es necesaria la creatividad en la educación?, ¿se puede o se debe enseñar a ser creativo?

Para responder a estas preguntas y tras determinar que la creatividad SÍ que está en auge en la sociedad de nuestros días, vamos a analizar la creatividad desde el punto de la educación.

 

CREATIVIDAD Y EDUCACIÓN.

La educación es un pilar base en la vida de todo individuo. La personalidad, valores, habilidades  y actitudes están condicionados fuertemente por la educación que recibimos. Aunque la educación, cuando somos pequeños, se recibe en diferentes ámbitos, he decidido centrarme en la educación proveniente de la escuela porque es la que como profesor de educación primaria que soy, me afecta actualmente de forma más directa.

Hasta ahora la educación que recibimos se limita a la observación pasiva, es unilateral y se basa en la memorización de conceptos y contenidos. Lo que se fomenta con este tipo de educación es la memorización, el conocimiento de contenidos relativos a cultura general, pero no se produce el desarrollo mental del que habla Rubinstein en su libro “Sobre el pensamiento y las vías de su investigación, 1978”, que tan necesario es para la resolución de problemas o búsqueda de nuevas soluciones.

Además, lo que obtenemos con este tipo de educación son resultados bastante mediocres, observables en los diferentes informes PISA (ver tabla a continuación referente a los resultados de 2014 en diferentes materias):

 

 

 

 

 

 

 

Ante estos malos resultados, debemos preguntarnos qué estamos haciendo bien y en qué nos estamos equivocando.

Aunque seguramente lo que provoque esos malos resultados sea fruto de muchas otras variables, la alta tasa de abandono escolar de los jóvenes (28,8% en 2013) es posible que pueda deberse, entre otras muchas razones, a la falta de motivación de los alumnos.

Para solventar esta situación, una posible salida puede ser llevar la creatividad a la educación tradicional que venimos impartiendo para buscar nuevas soluciones, nuevas materias que ayuden a los alumnos a convertirse en profesionales en potencia, nuevas formas de dar clase (que ya están ganando importancia, como la educación 2.0) para que quizás, y sólo quizás, logremos que los alumnos vayan contentos a clase, motivados por aprender lo que les enseñamos, y que valoren mejor la educación  que les estamos dando. No pretendo decir que lo que les enseñamos ahora no sea importante, pero es posible que debamos comenzar a profundizar en nuevos campos, o nuevas formas de hacer las cosas.

Todas las personas nacemos siendo creativos, pero a lo largo de nuestras experiencias y con la educación que recibimos, vamos dejando de serlo. En los colegios nos enseñan, conductas y lo que está bien y/o lo que está mal (pero este punto es bastante relativo). Para que se entienda lo que quiero decir lo explicaré mediante un ejemplo: Cuando somos pequeños y, por ejemplo, nos regalan un camión de juguete, se nos ocurren mil maneras de jugar con él, de aprender con él. Si un niño decide jugar a desmontar el camión, sus padres o el profesor con el que se encuentre dirán que así no se juega y le enseñarán a jugar con el camión, rodándole por el suelo, porque así es como pensamos que es la forma de jugar con él. Al enseñar esto al niño estamos frenando su creatividad. Es un hecho puntual, pero repetidas veces hace que nos instalemos en una forma de pensar automática, común, y que sigue un patrón social relacionado con lo que entendemos que es “lo normal” o “correcto”.

Cuando ese niño encuentre un trabajo, y se enfrente a un problema diferente a lo común, es posible que no sepa cómo resolverlo, pues tiene “atrofiada” la creatividad que le ayudaría a buscar una solución adecuada para ese nuevo problema.

Por lo tanto y a modo de conclusión diremos que la educación tiene un papel muy  importante en el desarrollo de conductas creativas, y que por lo tanto debería de adaptarse a las nuevas demandas y necesidades de la sociedad, y comenzar por lo menos en las etapas más tempranas de las educación a fomentarla, y buscar nuevas formas de impartir los contenidos de forma que motiven y capten la atención de los alumnos que la reciben.

 

A partir de este punto sacamos también la respuesta a otra de las preguntas que habíamos planteado al comienzo de esta exposición, y es que si la creatividad se va frenando a lo largo de los años, consecuencia de la educación recibida, del entorno en el que nos encontramos y por las reglas morales de la sociedad, también es posible volver a recuperarla.

Además, como previamente señalé al hablar de la importancia de la creatividad, existen numerosos libros (entre los que quiero destacar el de “Piensa como un genio”, de Juan Prego) que precisamente consisten en eso: técnicas y ejercicios para fomentar el pensamiento creativo de las personas. Por lo tanto, eduquemos en creatividad, fomentemos la creatividad y comencemos a pensar creativamente.

 

 

 

http://webprod.esdi.es/content/pdf/anatomia-de-la-creatividad.pdf

http://psicoeducat2013.wordpress.com/2014/02/06/joy-paul-guilford/

http://www.edukanda.es/mediatecaweb/data/zip/1088/page_02.htm

http://www.eoi.es/wiki/index.php/Pensamiento_convergente_/_Pensamiento_divergente_en_Innovaci%C3%B3n_y_creatividad

http://www.revista.unam.mx/vol.1/num3/art1/

http://epp.eurostat.ec.europa.eu/cache/ITY_OFFPUB/KS-GL-13-002/EN/KS-GL-13-002-EN.PDF

http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=54700403

 

Rubinstein, SL. “Sobre el pensamiento y las vías de su investigación”. Moscú: editorial Universidad Estatal, 1978.

Csikszenmihalyi, M. (1998) Creatividad. El fluir y la psicología del descubrimiento y la invención. Paidós. Barcelona.

Guilford, J. P. Strom, R. D.(1978) Creatividad y Educación. Ediciones Paidós. España.

 

 

Alfredo Gonzalez

 

 

 

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